La Vigilia, de Marc Torra Giralt

La Vigilia, de M. T. Giralt

Dentro del género fantástico, en el que se incluyen con sus debidas subdivisiones, el terror, la fantasía y la scifi, resulta a veces complicado el catalogar una novela. Se acuñan a veces denominaciones basadas en la mezcolanza de artificios que dan en llamar a estas de una forma u otra, y de ahí los subgéneros. Dentro de estos resulta llamativa la llamada fantasía moderna, por incluir esta elementos típicos (magia) y no típicos de la fantasía, pero con desarrollo en nuestros días. Siempre me ha resultado difícil incluir este tipo de novelas dentro de uno u otro estilo, de hecho siempre escapo o no entro en discusiones cuando de esto se trata, ya que en la variedad de las mismas reside su encanto y controversia, siendo para unos muy clara la denominación y no tanto para otros. La Vigilia pertenecería a este grupo, con mucha fantasía, pero alejada de los cánones. Como en otras paralelas, mantiene la fantasía digamos adulta, alejada de duendes,dragones, elfos etc.., convirtiéndose en una lectura, y sin menospreciar a otras, más seria. Tal y como Barrenechea definió "la fantasía es aquella que presenta en forma de problemas hechos anormales, anaturales o irreales en contraste con hechos reales, normales o naturales". Cabría preguntarse entonces que novela no entra dentro de estos cánones. En este sentido La Vigilia entra  dentro del género fantástico con pleno derecho, siempre dentro del esquema de los mundos paralelos, al existir un vínculo y una influencia del uno en el otro. Dicho esto, vayamos con un pequeñísimo análisis de la novela.

Una extraña enfermedad hace que miles de personas a lo largo y ancho del mundo caigan en una especie de estado comatoso, sin que la ciencia o la medicina sepan el motivo. A partir de ahí se bifurcan varios hilos argumentales que desencadenan en un final apoteósico. Desde Torquemada a la Roma del siglo XXI, la revelación de la gran mentira... todo cabe en La Vigilía  
 Para no seguir desvelando demasiado os diré que M.T. Giralt envuelve su novela en un halo de misterio del que es difícil abstraerse y del que vas saliendo con las dosis justas. La acción se centra en la consecución de unas reliquias custodiadas por la Iglesia Católica, reliquias que abren las puertas del cielo... o del infierno.  Asociaciones secretas, sectas, intrigas, seres legendarios que intentan volver para terminar una guerra inacabada. La lucha eterna entre el bien y el mal, el descubrimiento de que nada es lo que parece, un engaño que  lleva milenios instalado en La Tierra, especialmente en los dos últimos. Luchas que van más allá de lo que el hombre normal puede concebir, aunque éste siga siendo parte fundamental de una guerra que escapa a su imaginación.

Soy sincero cuando digo que La Vigilia me gustó y mucho. Fue como una bocanada de aire fresco, y eso que vengo de leer a Carrol y sus locuras. La verdad es que estuve enganchado a ella, deseando conocer el final, final que también me sorprendió. El sabor de boca que me dejó es de esos que perduran. Cuando la terminé me pregunté, aún conocedor de que acabo de leer una novela encuadrada dentro del género fantástico, si las cosas no pudieron suceder así ¿Por qué no?

Lúcida y trepidante, La Vigilia no dejará impasibles a quienes la lean. Sin duda recomendaría su lectura a todo el mundo.

Para más info o pedidos podéis escribir a este correo  Alfil.negro.fantasy@gmail.com